Airbnb sigue ofreciendo ventajas a sus usuarios. Después de permitir el pago fraccionado entre las diferentes personas alojadas, ahora ha puesto en marcha una nueva opción. Concretamente, la plataforma ofrece a sus huéspedes la posibilidad de pagar en dos plazos, uno en el momento de hacer la reserva y otro en las fechas cercanas a la llegada al destino. De este modo, los usuarios de Airbnb ya no tienen la obligación de abonar el importe total, método que resultará más ventajoso si la reserva no es de uso inmediato.
Durante la prueba piloto de este servicio, la plataforma detectó que un 40% de los usuarios se inclinaban por esta opción de pago y que, además, en otras transacciones ayudaba a que los viajeros optaran por transacciones de valor más alto.
Ventajas también para los anfitriones
Los posibles beneficios de esta nueva forma de abonar el montante económico también repercutirán en los anfitriones. Porque, al igual que sucede con el pago por parte de los usuarios, durante la prueba piloto, ya se detectaron cambios en los patrones de comportamiento. Con esta opción disponible, los usuarios se lanzan a reservar con más antelación, generando además el doble de reservas.
Arnaldo Muñoz, director general de Airbnb Marketing Services, añade que la startup entiende que «puede ser difícil pagar unas vacaciones por adelantado, especialmente tras las fiestas y con la cuesta de enero. Por esta razón, la plataforma ha introducido esta nueva opción que permitirá a los españoles realizar sus reservas de verano con antelación y no perder la oportunidad de escoger su alojamiento perfecto para el periodo estival”.