Existe un número de establecimientos hoteleros que están, digamos, un poco desfasados. Como están haciendo más o menos caja, ¿para que preocuparse?. Si estos establecimientos tuvieran una competencia más severa actuarían de otra forma. El resultado de esta actitud puede ser uno de los motivos que marquen la diferencia entre dos productos de las mismas características pero con un resultado completamente distinto ante los clientes.
Deberían preocuparse más de sus equipos de personas, de darle más autonomía al director para hacer cambios, estudiarían la competencia, reformarían sus instalaciones, consultarían con otros profesionales; pero para estas propiedades, que suelen ser en su mayoría hoteles independientes, esto puede suponer un gasto excesivo.
Sin embargo, existe un determinado número de acciones que no cuestan tanto dinero, es más cuestión de querer poner en marcha el cambio, sólo tienen que elegir bien en manos de qué asesor se ponen. En segundo lugar, la inversión a realizar en algunos hoteles, si se realiza por profesionales de verdad, asegura que la inversión se recuperará con total garantía. En la mayoría de las ocasiones, con creces. Existen empresas que incluso lo pueden asegurar por escrito si se encargan del 100 x 100 del proyecto.
Cuando amigos y conocidos me dicen «tienes ir a visitar las instalaciones de tal hotel», te das cuenta del motivo por el que existen hoteles con esa reputación, teniendo las mismas estrellas que otro que está a 800 metros.
El desorden del personal discutiendo por los horarios delante de los clientes, la decoración obsoleta, alfombras muy gastadas y fuera de tono, plantas con sólo dos hojas verdes, muebles colocados en lugares inadecuados, servicios públicos muy faltos de todo… En definitiva, cobran por las estrellas que el declaró cuando inauguró el hotel hace 20 años y desde entonces no se regaron las plantas ni la motivación del personal.
¿Ustedes piensan que estos cambios son una inversión económica importante en un hotel? Yo diría que no. La diferencia entre los dos hoteles radica en lo siguiente:
Teniendo la misma categoría tiene a su favor, una propiedad que se preocupa de sus recursos humanos, tiene un equipo motivado, sonriente y en perfecta comunicación con los clientes, se convierte no en porteadores de servicios, son personas serviciales, transmiten alegría, cuidan las instalaciones, están comprometidos y a gusto de trabajar en un hotel ecoeficiente, un hotel verde. Por lo tanto, el cliente se siente a gusto y repite. ¿Usted en cuanto valoraría esta inversión?
A la AEDH nos llegan solicitudes de ayuda para cambiar estos paradigmas, pero por desgracia existen más!. Cada día estamos ayudando a más hoteles independientes, de 3-4 estrellas, hoteles rurales, restaurantes y colaboramos con estudios de arquitectura. Ayudamos con nuestros profesionales a salir adelante dándoles consejos constructivos para que nadie los engañe. Nos estamos rodeando de empresas responsables y bancos por si necesitan subvenciones personalizadas para cada proyecto. De esta forma, todos los implicados hablamos en el mismo lenguaje.
La AEDH aconseja que se seleccione un único proveedor para todo el proyecto que les ofrezca garantías. Que esté comprometido con la eficiencia energética. La pintura de una pared, ¿vale lo mismo amarilla que en un tono crema, verdad? ¿Por qué no se deja aconsejar?
Comience por sus equipos de personas y continúe con todo lo demás, notará la diferencia en poco tiempo. ¡Pida información!
Imagen Categorías de Hoteles vía Shutterstock.