El séptimo hotel de Concept Hotel Group ya es casi una realidad. En concreto, lo será en 2022. El Grand Paradiso, que estará situado junto al actual Paradiso, nace como un proyecto dedicado al cine, al cortometraje, al videoclip.
«Queremos reivindicar el arte audiovisual en todas sus facetas, superándonos en diseño y concepto», señala Diego Calvo, CEO de la compañía. «Queremos seguir rompiendo moldes con productos hoteleros diferenciadores de primer nivel que además apuestan fuerte por la cultura», añade.
Sin duda será un gran atractivo para la zona de la Bahía de San Antonio, donde pretenden seguir creciendo «y establecer un distrito que seduzca tanto al local como al turista».
Un concepto audiovisual
Grand Paradiso es un proyecto dedicado al arte audiovisual en todas sus formas: El cine, el cortometraje, el videoclip…
Es un universo que rinde homenaje al séptimo arte y sus representantes más inspiradores para Concept, dan nombre a las tres grand suites: Almódovar, David Lynch y Wes Anderson.
Las habitaciones llevarán el nombre de un artista audiovisual internacional, contaremos con un cine donde proyectaremos películas y documentales y habrá una galería donde se expondrán en pantallas las obras de distintos artistas. Un lugar donde confluyen los colores pastel, el art decó -en su versión más clásica y elegante- y el hedonismo en plena bahía de San Antonio, en Ibiza.
Arquitectura y diseño de interiores
Este nuevo hotel sigue la línea arquitectónica de Paradiso, pues pretende ser su extensión premium.
Concept ha desarrollado un briefing conceptual muy detallado que el estudio IlmioDesign se ha encargado de llevar a cabo, diseñando cada detalle guiados por los cánones estéticos del art decó más clásico: Los colores pastel, las formas geométricas y el contraste de luz y texturas.
El estudio de Marcos Torres ha elaborado el arte gráfico con premisas como las líneas finas y marcadas o los detalles dorados que envuelven de elegancia nuestro nuevo concepto artístico en forma de hotel.
El papel del lobby
«La primera impresión cuenta (y mucho), por eso hemos eliminado el típico mostrador que da la bienvenida en recepción», señala Diego Calvo.
El lobby es el punto de encuentro «y queremos
hacer del check-in un momento mucho más cálido en el que el cliente se sienta cómodo», explica.
Para conseguirlo, habrá una jukebox de los 70′ y una pequeña mesa en la que podrá sentarse tranquilamente mientras toma un cóctel.
«Las formalidades no son nuestro estilo y esa primera impresión tiene que reflejar la personalidad irreverente que nos caracteriza», añade el CEO de la compañía.
Las suites… y las Grand Suites
Para dormir en un hotel de película no hace falta ir al Bellagio de Las Vegas (Ocean’s Eleven), ni al Beverly Wilshire de Los Ángeles (Pretty Woman), ni al Park Hyatt de Tokio (Lost in Translation).
Las habitaciones de Grand Paradiso se pueden concebir como una continuidad de las de Paradiso, pero más lujosas y con un estilo algo más clásico.
Los detalles conceptuales que incluirá son: un cuadro-TV mostrando el trabajo audiovisual del artista que da nombre a la habitación, un libro de contenido relacionado, un cuadro enmarcado con cartel de algún trabajo del artista y los clásicos altavoces Marshall y nevera Smeg que ya son clásicos de la casa Concept.
Asimismo, el hotel contará con tres Grand Suites frontales que tendrán como punto fuerte un jacuzzi. Como novedad en la iluminación, incluirán una bola disco con varios moods en todas las tipologías de la habitación: disco, party, sexy… el huésped podrá elegir según el momento en que se encuentre.
Con galería de arte incluida
El Paradiso Grand Hotel contará también con una galería de arte contemporáneo donde se expondrán obras de artistas audiovisuales internacionales que formarán parte de ciclos temporales.
La intención es que las intervenciones artísticas llevadas a cabo en el hotel sean experiencias visuales que lleven los sentidos del huésped a otro nivel y que se conviertan en un recuerdo estimulante.
Bar-restaurante y piscina
La idea del Grand Paradiso es contar con un restaurante elegante, con una barra desde la que se pueda servir tanto al exterior (piscina) como al interior del hotel.
Un espacio donde el arte, la gastronomía y la música se funden en un solo concepto que los resume a la perfección.
Otro de los puntos fuertes del hotel es la zona de la piscina, que pretende ser el resurgir de la ‘dolce vita’ americana. «Habrá una cabina de DJ con forma de caseta de playa clásica de Miami Beach, siguiendo el estilo de Paradiso», relata Calvo. Además, se habilitará la parte inferior para el DJ y en la superior realizarán actuaciones.
«En la parte de atrás haremos un backstage con un sofá circular para capacidad de 20 personas y que recorrerá la cabina», añade.
Además, en la azotea del hotel estará ‘The Top Bar’, un lugar destinado a tomar copas y disfrutar de la puesta de sol. Además de la barra, tendrá también un pequeño escenario para actuaciones y cabina de DJ.
Caduzzi, el elemento rompedor
Si la Zero Suite es el elemento más disruptivo del Paradiso, en Grand Paradiso será el cadillac «El Dorado», de color rosa y habilitado como jacuzzi. De ahí su nombre: El caduzzi.
Y, por supuesto, un cine
Uno de los grandes puntos fuertes del hotel es un cine clásico en su interior, con butacas de terciopelo rojo y mesitas con su lámpara individual. Sin duda, un gran homenaje al séptimo arte. «Un pequeño templo para los amantes del cine, donde se preoyectarán películas en versión original, ciclos de documentales…», señala Diego Calvo.
La conexión entre los dos hoteles
Por último, cabe destacar el ‘Venice Bay Court’, o lo que es lo mismo, la zona de paso que une Paradiso y Grand Paradiso. Este espacio multifuncional servirá para practicar deporte o para realizar encuentros a modo ‘meeting point’.
Para ello, construirán una zona deportiva (gimnasio al aire libre, pista de basket…) y otra de ocio, en la que habrá unos food trucks y un escenario para actuaciones en directo.
