No. Por mucho que algunos intenten venderte esa idea, la inteligencia artificial no solo no es la enemiga de tu futuro, sino que puede convertirse en la mejor aliada a la hora de optimizar y rentabilizar un negocio hotelero. Un máquina, por ejemplo, puede incorporar y analizar datos sobre el comportamiento de un cliente y sus necesidades de una forma muchísimo más rápida que las capacidades humanas. De esta forma, se puede crear una imagen hiperdetallada del cliente, construyendo segmentos más profundos y sofisticados.
Un análisis más profundo del comportamiento de las compras realizadas con anterioridad, combinado con el feedback en tiempo real con el cliente, podría indicar si éste se encuentra realmente en «modo compra» o si está predispuesto a hablar con un asesor comercial o de call center que le ofrezca un producto concreto. Y esta es una materia en la que la inteligencia artificial y el machine learning se mueven como pez en el agua. Más aún: también pueden ayudar a descubrir nuevas oportunidades de negocio, identificando patrones más detallados a partir de los datos, de una forma que pasaría completamente desapercibida para un analista humano.
El machine learning es una herramienta muy poderosa que depara a las empresas la posibilidad de explorar oportunidades aún no atisbadas del todo. Pero, como toda innovación tecnológica, es importante no saltarse pasos, ni empezar a utilizarla antes de tener claro cómo y para qué se quiere usar, así como los resultados que se quieran analizar. También es necesario asegurarse de que los datos introducidos al sistema sean los correctos y útiles para lograr el objetivo final: la información inútil da resultados inútiles.
En la pasada edición de FiturtechY, Darío Lombardi, vicepresidente de BigML, trazó algunas líneas maestras sobre las utilidades del machine learning. Así, destacó su uso como sistema de recomendaciones, sus ofertas dinámicas, la segmentación y el clustering (agrupamiento) y la detección del fraude. Algunas empresas que bien valen como ejemplo de la eficacia de estos sistemas son Starwood, que gestiona mediante machine learning el precio de las habitaciones. O Expedia que, a través de machine learning, busca vuelos y detecta fraudes. O el caso de Hotel Tonight, que predice las ventas utilizando uno de estos sistemas basados en la inteligencia artificial. Según Lombardi, el machine learning «mejora las decisiones encontrando patrones escondidos, ayuda a localizar valor en los datos y siempre va a ganar al ser humano, debido a que puede conseguir enormes cantidades de datos en segundos».
En cuanto a las reticencias en el uso de la inteligencia artificial, el peligro no es perder el control, la posibilidad de quedarse sin trabajo o que Google establezca que la web de la empresa u organización en cuestión no es lo suficientemente relevante. El verdadero peligro es no hacer caso a las posibilidades de esta nueva herramienta tecnológica y permitir que nos pase por alto.
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