El ITH propone un nuevo modelo de sostenibilidad turística para los hoteles

El Instituto Tecnológico Hotelero celebró el 12 de julio en el Circulo de Bellas Artes su Asamblea Anual donde presentó la Memoria Anual del año 2015. La apertura del acto corrió a cargo de Doña Isabel Borrego Cortés, secretaria de estado del turismo, inició su intervención destacando que “la colaboración entre la secretaría y el ITH ha sido una constante, entre otros motivos porque ambos trabajan en la misma línea, la innovación”. La secretaria de estado del turismo destacó también la labor que el ITH está realizando en materia de sostenibilidad.
Posteriormente el ITH realizó un análisis de las actividades desarrolladas durante el año 2015. En este sentido, Álvaro Carrilllo, director general del ITH hizo especial hincapié en los proyectos abiertos a los hoteleros como es la compra agregada de energía, para finalmente, hacer referencia a los trabajos de asesoría que el ITH ha realizado en diferentes Comunidades Autónomas españolas.
Pero sin duda, el proyecto estrella del ITH es el que desarrollará en el marco de un acuerdo suscrito con la Secretaría de Estado de Turismo y que se fundamenta en un nuevo modelo de sostenibilidad turística. El objetivo del proyecto es que los hoteles puedan autoevaluarse y conocer todo tipo de ayudas y subvenciones en materia de eficiencia energética y sostenibilidad. El modelo presentado en la asamblea cuenta además con la colaboración de iEnergy, Dyrecto Consultores, Allcot e Innova Netgrup.
A este respecto, Alberto Marín, CEO de Innova Netgup, señaló que “tenemos que conseguir una estrategia de valor añadido, y la sostenibilidad es uno de los puntos fuertes” y añadió que “aunque hay muchos hoteles que ya trabajan en ello desde hace tiempo, hay que continuar caminando”.
Por su parte, Coralía Pino, responsable del Área de Eficiencia Energética y Sostenibilidad del ITH, apunta que: “La sostenibilidad y la eficiencia energética en hoteles no supone solo reducir costes y ahorrar energía, sino mantener un mayor equilibrio con el entorno, mejorar las instalaciones y el nivel de confort en los clientes, construir la marca y la imagen corporativa en torno a valores positivos, y ganar en reputación. Hay que dejar claro que no se debe poner precio a la sostenibilidad. Ser un hotel sostenible no significa necesariamente tener que ser más caro que el resto de sus competidores, pero sí supone un factor de diferenciación frente a su competencia”.