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Los viajes de negocios y de placer se combinan cada vez más. A medida que la industria de viajes emerge de la pandemia, empiezan a asentarse los viajes “combinados”, es decir, viajes que tienen doble propósito: tanto para negocios como para placer.
Skift.com ha encuestado a ejecutivos del sector para saber si es probable que ellos mismos realicen un viaje combinado en 2023: más del 81% de los encuestados dice que definitivamente planea hacerlo.
Ante esto, también se planteó a los responsables de la industria cuál es su perspectiva sobre los cambios que no dejan de revolucionar al sector, y éstos devolvieron 4 conclusiones sobre lo que nos depara el 2023
La inflación es el archienemigo del sector
Skift pregunto a estos líderes del sector acerca de sus mayores preocupaciones a futuro, por el contrario. Solo alrededor del 14% de los encuestado dijeron que están más preocupados por la falta de demanda; sin embargo más del 80% nombraron la inflación y la inversión en costes como el mayor de los problemas.
La demanda ha vuelto a aumentar tras la pandemia, lo que significa que las aerolíneas tendrán que trabajar para satisfacer la enorme avalancha de pasajeros en camino.
El personal de las aerolíneas
En el sector turístico y, en especial, el área dedicada al transporte aéreo, existen de media 11 millones de ofertas de trabajo pero solo 6 millones de personas desempleadas buscan trabajo. Es por ello que casi el 63 % de estos directivos encuestados califican la dotación de personal aéreo como un grave problema dentro del sector turístico.
Las tarifas son la siguiente preocupación más alta que ha recogido la encuesta de Skift. Casi el 30% hablan de la subida de precios como el mayor problema del sector de cara a futuro, tomando sobre la mesa los datos: a partir de junio, las tarifas aéreas aumentaron un 25% respecto 2021.
Respecto a las características de los servicios turísticos y la problemática sobre la sostenibilidad, menos del 4% los nombraron como un obstáculo crítico al que sector deberá enfrentarse.
Políticas de cancelación
Con la llegada de la pandemia, muchas empresas del sector se adaptaron a la situación y cambiaron sus políticas: en el caso de las aerolíneas redujeron o eliminaron las tarifas de cancelación, y estas condiciones se han mantenido vigentes hasta la actualidad.
Ahora, sin embargo, con nuevas problemáticas como la inflación o la situación de conflicto mundial, son muchas empresas turísticas que plantean un nuevo giro de 180 grados a su modus operandis.
La encuesta también planteó a estos ejecutivos hoteleros si su negocio planeaba actualizar las políticas de cancelación de viajes ya implementadas. Casi el 56 por ciento de los encuestados dijeron que, de hecho, harían cambios permanentes en esas políticas, y alrededor del 11 por ciento dijo que harían cambios temporales. Casi el 34 por ciento de los encuestados no planean cambios.
Fuente: Skift.com
Imágenes cedidas: Adam Nowakoski
