A pesar de los avances en igualdad de género en diversos sectores, la tecnología de viajes B2B sigue mostrando una preocupante falta de representación femenina en puestos directivos. Apenas el 15,6% de los líderes en este ámbito son mujeres, según un análisis reciente de Belvera Partners. Este estudio, realizado en julio de 2024, se basó en perfiles de LinkedIn y utilizó el Belvera B2B Travel Tech Map como base para evaluar a más de 400 empresas y personalidades clave del sector.
El estudio destaca que las áreas con mayor presencia femenina son los grupos lobbies, con un 36%, mientras que el sector de alquiler de coches muestra los peores resultados, con apenas un 10% de mujeres en puestos de liderazgo.
Comparado con un análisis similar realizado en 2021, donde solo el 12,4% de los CEO eran mujeres, la cifra ha mejorado ligeramente, aunque la situación sigue siendo preocupante. Roman Townsend, director general de Belvera Partners, destacó la importancia de estos datos para reflejar la falta de diversidad en la industria y subrayó la necesidad de aumentar la representación femenina en puestos clave.
Líderes como Maria Sellar de Terrapay y Ayşe Yaşar de Bedsopia coinciden en que este desequilibrio no solo es injusto, sino que también afecta a los resultados de las empresas, ya que muchas decisiones de viaje son tomadas por mujeres y, por tanto, su falta de representación en la dirección limita la capacidad de las compañías para entender a este segmento de mercado.
Por su parte, Luisa Oyarzabal, vicepresidenta de GoNexus Group, expresó que la disparidad de género en el liderazgo es un desafío que debe afrontarse de manera decidida, instando a las empresas a presentar planes con objetivos claros para reducir esta brecha. Asimismo, Caroline Dal’lin de Custom Travel Solutions señaló que, aunque el cambio está en marcha, todavía es lento, y urgió a que se realicen más esfuerzos para superar las barreras de género en el sector.
Este informe resalta la necesidad de un cambio profundo en la industria de la tecnología de viajes, no solo para fomentar la diversidad, sino para mejorar la competitividad y la capacidad de respuesta a un mercado cada vez más diverso.