Contenido
- Personalización y compartir experiencias: nuevo canal de marketing
- Las experiencias, prioridad para las nuevas generaciones
- Enfoque en los viajeros mayores: El valor del contacto humano
- El auge del turismo de lujo: Un nuevo perfil de viajero en el turismo 2024
- Alojamiento: Nuevos modelos y propuestas de valor
El sector del turismo y la hospitalidad se enfrenta a un 2024 lleno de desafíos y oportunidades, donde la personalización y el uso estratégico de datos se perfilan como herramientas clave para atraer y fidelizar a los viajeros. Según el último informe de McKinsey & Company, la creciente diversidad en los perfiles de los turistas y la acelerada evolución tecnológica están impulsando cambios significativos en la manera de abordar la experiencia de viaje.
Personalización y compartir experiencias: nuevo canal de marketing
El informe sobre las tendencias del turismo 2024 subraya que la era de las ofertas genéricas ha terminado. Ahora, más que nunca, es esencial que las empresas turísticas segmenten a sus clientes con precisión y ofrezcan experiencias personalizadas. Este enfoque es crucial, especialmente cuando se considera que el 66% de los viajeros encuestados indicaron estar más interesados en viajar ahora que antes de la pandemia. Además, los millennials y la Generación Z, quienes realizaron un promedio de casi cinco viajes en 2023, representan un segmento clave que demanda ofertas adaptadas a sus preferencias únicas.
La tendencia de los viajeros a compartir sus experiencias en redes sociales representa una oportunidad de oro para las empresas del sector. Según el informe, el 92% de los viajeros más jóvenes mencionaron que su último viaje estuvo influenciado de alguna manera por las redes sociales. Hoteles y destinos turísticos pueden implementar herramientas que faciliten este intercambio, convirtiendo a los viajeros en defensores de la marca. Estrategias como la instalación de fotomatones, la entrega de souvenirs personalizados y el uso de promociones compartibles pueden potenciar significativamente la visibilidad de la marca.
Las experiencias, prioridad para las nuevas generaciones
Los millennials y la Generación Z están redefiniendo el concepto de viaje, priorizando las experiencias. Este grupo muestra una notable disposición a gastar en vivencias únicas, incluso cuando sus presupuestos son ajustados. De hecho, el 52% de los viajeros de la Generación Z afirmaron que prefieren gastar en experiencias, recortando en otras áreas como transporte o compras.
Las experiencias son cada vez más importantes para estos viajeros y las organizaciones de marketing de destinos han desempeñado un papel en esto desde hace mucho tiempo. Por ejemplo, VisitScotland ayuda a los visitantes a descubrir actividades interesantes, como asistir a lugares de rodaje de Harry Potter y catas de whisky.
Además, varias empresas privadas que ofrecen plataformas en línea de descubrimiento y reserva de actividades de viaje, como Viator, GetYourGuide y Klook, han logrado un crecimiento considerable en los mercados de EE. UU., Europa y Asia. GetYourGuide cuadriplicó sus ingresos entre 2022 y 2023, los ingresos de Viator aumentaron un 49% durante el mismo período y Klook informó el doble de clientes nuevos en 2023 que en 2019.
Enfoque en los viajeros mayores: El valor del contacto humano
Pero, no solamente son importantes los jóvenes viajeros, sino también los mayores, quienes siguen siendo un segmento clave, con un poder adquisitivo importante, con un enfoque hacia el viaje más tradicional. Prefieren la interacción humana y son más propensos a disfrutar de destinos familiares. Estos viajeros, que suelen planificar sus viajes en temporadas bajas, representan el 25% del gasto total en turismo de lujo, lo que destaca su relevancia para el sector. Las empresas deben mantener servicios presenciales y personalizados, y ofrecer experiencias que combinen comodidad y familiaridad.
El auge del turismo de lujo: Un nuevo perfil de viajero en el turismo 2024
El turismo de lujo está experimentando un crecimiento más rápido que cualquier otro segmento, impulsado por una base cada vez mayor de viajeros adinerados en Asia y otras regiones emergentes. El informe de McKinsey revela que el 35% del mercado de turismo de lujo está compuesto por personas con un patrimonio neto de entre 100.000 y un millón de dólares, conocidos como «aspirantes al lujo». Este grupo busca experiencias exclusivas, pero también un buen valor por su dinero, lo que representa una oportunidad para las marcas que desean captar su lealtad a largo plazo. La región de Asia-Pacífico, donde se concentra el 41% de las habitaciones de hotel de lujo en construcción, se perfila como un epicentro de este crecimiento.
Al contrario de lo que se podría pensar, muchos viajeros de lujo buscan desconectarse del mundo digital durante sus vacaciones. Según el informe, estos viajeros tienen entre dos y tres veces más probabilidades que el viajero promedio de querer desconectarse de sus dispositivos y sumergirse en nuevas experiencias. Este deseo de desconexión es una oportunidad para que las empresas turísticas ofrezcan entornos que faciliten una verdadera desconexión, combinando lujo con tranquilidad y privacidad. Con un 72% de los viajeros de lujo interesados en visitar nuevos destinos, la innovación en experiencias de desconexión podría ser una estrategia ganadora.
Alojamiento: Nuevos modelos y propuestas de valor
El sector del alojamiento está experimentando cambios significativos en sus modelos de negocio. Las grandes cadenas hoteleras han ido abandonando progresivamente la propiedad directa de hoteles en favor de expandir su negocio a través de franquicias y modelos de gestión. Este enfoque ha demostrado ser eficaz, como lo demuestra una correlación del 0,84 entre la cuota de propiedades franquiciadas de una empresa hotelera y su margen de beneficio neto. Sin embargo, este modelo de «activos reducidos» no es adecuado para todos. Las cadenas de hoteles de lujo han optado por mantener la propiedad interna para garantizar el control de los estándares de calidad, mientras que las marcas más pequeñas se enfocan en crear experiencias distintivas a menor escala.
Otra tendencia emergente en el sector del alojamiento es el incremento de las reservas directas. Durante mucho tiempo, los hoteles han dependido de agencias de viajes online (OTAs) para captar clientes, pero ahora están intentando recuperar estas relaciones directas con los huéspedes. Para reducir las tarifas de intermediación y conocer mejor a sus clientes, los hoteles están fomentando las reservas directas mediante herramientas como garantías de mejores tarifas, programas de recompensas más atractivos y aplicaciones móviles mejoradas.
Además, el uso compartido de viviendas, popularizado por plataformas como Airbnb, se ha consolidado en el mercado. Este segmento ha crecido del 10% al 14% del valor total de las reservas entre 2017 y 2023, y se ha posicionado como algo más que un sustituto de los hoteles tradicionales. Airbnb, por ejemplo, ha destacado las ventajas del home sharing, como el espacio y la privacidad, en comparación con otras formas de alojamiento. Este tipo de alojamiento también ha servido como un canal de distribución clave para hoteles más pequeños, ofreciendo un mayor control sobre el inventario y tarifas más bajas que otros canales tradicionales. En 2019, Airbnb reportó un aumento del 152% en la cantidad de habitaciones disponibles en hoteles boutique, bed and breakfast y resorts a través de su plataforma.
Imágenes cedidas: Mor Shani en Unsplash
