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El turismo deportivo empieza a cobrar cada vez más valor, siendo el gimnasio dentro del hotel un factor clave para muchos viajeros a la hora de elegir un alojamiento.
El principal target de aquellos hoteles que cuentan con este servicio son huéspedes más interesados en la cultura fitness, aquellos que realizan actividad física de manera rutinaria y buscan mantenerse en forma incluso fuera de casa.
Sin embargo, incorporar ocio deportivo entre los servicios de tu hotel supone un fuerte reclamo para todo tipo de cliente. De hecho, quienes teletrabajan son los que dan más prioridad a los hoteles con gimnasio en sus criterios de búsqueda.
Te explicamos qué necesitas para diseñar un gimnasio que aporte valor a tu hotel, y que llame la atención tanto de huéspedes como de compañeros del sector.
Equipamiento para diseñar un gimnasio en tu hotel
El viajero tiene un perfil y características diversas, siendo cada vez más exigente a la hora de tomar una decisión. Además de confort, la mayoría de clientes buscan la oportunidad de mantener su rutina habitual incluso fuera de casa.
Entre el equipamiento deportivo para hotel que más demandan los huéspedes se encuentran las máquinas de cardio y musculación: cintas de correr, bicicletas estáticas, remo, peso libre…
El fitness es una actividad en auge, aunque no solo los clientes aficionados ponen en valor un gimnasio incluido en el hotel.
Otras formas de ocio deportivo como piscinas, pistas de pádel o clases de baile también despiertan interés, prácticamente a cualquier tipo de usuario.
¿Cómo puede un hotel con gimnasio atraer más clientes?
Además de un equipamiento deportivo adecuado, la filosofía de negocio también debe enfocarse en el resto de necesidades que este tipo de cliente busca cubrir.
Los hoteles especializados en un área o tipo de cliente concreto demuestran obtener incluso más reservas que otros establecimientos ubicados en las zonas más turísticas: es por ello que targetizar tu hotel hacia la cultura del fitness puede ser un planteamiento clave para multiplicar la facturación.
Además de añadir una nueva línea de negocio que atraiga más clientes, incluir espacios de ocio deportivo dentro de tu hotel puede aportar muchas otras ventajas.
Suma valor a tu hotel
Una sala de musculación no es solo un espacio donde mantener una rutina activa en el día a día: muchos viajeros lo valoran como un espacio de socialización donde conectar con otros huéspedes.
Más allá de un alojamiento turístico, un hotel también puede resultar idóneo para empresas y entidades que buscan celebrar eventos y hospedar a sus invitados en establecimientos equipados con todo tipo de servicios.
Contar con equipamiento de alto rendimiento en el gimnasio de tu hotel puede ser un distintivo de tu firma por lo que, además de resultar atractivo para el cliente, también llamará la atención de posibles inversores que busquen apostar por la innovación.
Atrae a los turistas más exigentes
En los últimos tiempos, la posibilidad de mantener los hábitos deportivos y de salud fuera de casa se ha convertido en uno de los servicios más buscados entre los viajeros más exigentes.
Sin embargo, los aficionados al fitness no son el único tipo de cliente que se interesa por servicios cada vez más completos e innovadores durante su estancia.
Con el impulso del teletrabajo, muchos huéspedes tratan de cuidar su forma física incluso de viaje, ya sea por placer o por negocios.
Esta tendencia en auge explica por qué añadir un gimnasio a los hoteles puede incrementar la facturación, priorizando un tipo de cliente que no suele plantearse en la estrategia de negocio: un viajero que quiere seguir conectado a la rutina sin renunciar a la comodidad.
Imágenes cedidas: Unsplash
