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Antiga Casa Buenavista, un nuevo y elegante hotel boutique de 4 estrellas de estilo barcelonés, abre sus puertas en pleno centro de Barcelona (Ronda de Sant Antoni, 84). Ubicado en un emblemático edificio del siglo XX, el recién inaugurado establecimiento, de 4 estrellas con restaurante, cuenta con 43 habitaciones únicas que combinan el estilo tradicional y modernista del Eixample barcelonés con un inesperado toque ecléctico contemporáneo. Todas las habitaciones son exteriores y la mayoría cuentan con amplios ventanales con acceso a balcón o terraza.
El nuevo hotel, situado entre dos de los barrios más emblemáticos de la Ciudad Condal, L’Eixample y el Raval, incorpora también una oferta culinaria de mercado en su restaurante Casa de Comidas Buenavista, que busca transformar el concepto “Casa de Comidas” tradicional en un moderno espacio gastronómico con una fuerte apuesta por el producto y carácter local.
Estudio de arquitectura TDB Arquitectura
El hotel es propiedad de la familia andorrana Molleví, quien se encuentra detrás de la propiedad y transformación de este histórico espacio: el conocido restaurante Buenavista, con orígenes en el año 1918. La familia Molleví ha confiado la metamorfosis del espacio al estudio de arquitectura TDB Arquitectura, logrando un resultado sofisticado y acogedor. En concreto, el arquitecto Juan Trias de Bes ha concebido el proyecto que ahora respira este moderno hotel, de la mano de su equipo formado por Fernando Herrero, Marta Pascual y Jordi Flores y de Ricardo Villoria como Project Manager y Director Técnico de la obra completa.
El nuevo hotel mantiene la fachada original y todos los elementos de interés arquitectónico, incorporando elementos modernistas catalanes, como esgrafiados, molduras restauradas, techos con bóveda catalana, suelos hidráulicos, así como un mobiliario original en todos sus espacios. El proyecto también ha contado con la asesoría del equipo de MINIM para el mobiliario e iluminación decorativa del hotel, y de Concepción Padilla para el interiorismo y decoración del restaurante Casa de Comidas Buenavista.
Antiga Casa Buenavista es un hotel de gestión familiar, con un fuerte vínculo al barrio y la ciudad. Un nuevo concepto de establecimiento turístico que se aleja de la propuesta tradicional hotelera para ser próximo y local, respetuoso con el barrio y sus gentes, así como, inclusivo con todo tipo de públicos.
Un edificio con una historia familiar centenaria
La historia de este edificio se remonta a 1918, año en el que la familia Molleví inauguró el restaurante familiar Buenavista, especializado en una cocina tradicional de mercado con platos populares a precios asequibles.
Gracias a su estratégica ubicación y su proximidad con el entonces recién inaugurado Teatre Goya, el establecimiento familiar se convirtió rápidamente en un popular espacio entre intelectuales, artistas o burgueses de principios de siglo, pero también entre clases populares y familias de la zona. A lo largo de un siglo, el negocio ha sido gestionado por las sucesivas generaciones familiares que han sabido poner un sello personal a este lugar lleno de historia.
Hoy, transformado por completo, Antigua Casa Buenavista abre sus puertas como un nuevo hotel y restaurante, que aúna modernidad y tradición, respetando el carácter barcelonés de sus orígenes.
“El trato personalizado, así como la especial vocación de servicio, han sido siempre y queremos que sigan siendo la misión principal de este establecimiento. El vínculo familiar que tenemos con este espacio se ha mantenido a lo largo de los años y esto es algo que queremos transmitir a nuestros huéspedes: que puedan sentirse como en casa”, ha explicado Àlex Molleví, gerente del hotel Antiga Casa Buenavista.
La oferta gastronómica del nuevo restaurante de Antiga Casa Buenavista cuenta con la supervisión del chef leridano Marc Roca, dueño del restaurante Blau en Barcelona, para ofrecer una carta basada en la cocina de temporada y que combina los platos tradicionales y de raíz con un toque de modernidad.
El restaurante Casa de Comidas Buenavista busca mantener la esencia original de la popular Casa de Comidas que fue en sus inicios para ofrecer, un siglo después, una cocina fresca de mercado con un marcado carácter local y donde no faltan los clásicos desayunos gourmet o las tapas y platillos para comer en cualquier momento.
