El Gobierno ha decidido junto a Portugal suspender los vuelos procedentes de Reino Unido desde este martes, aunque sí permitirá la entrada de ciudadanos españoles o residentes en España. Y es que el brote que ha sufrido el coronavirus en este país está obligando a extremar las medidas para contener esta nueva cepa.
A su vez, el Gobierno español también reforzará el control fronterizo en Gibraltar. La propia Unión Europea ha pedido que se eviten todos los viajes no esenciales tanto a Reino Unido como de viajeros procedentes de allí.
España había decidido esperar a que la Unión Europea estudiar la forma de reaccionar de forma conjunta ante este nuevo brote, para no tomar una decisión unilateral que sí tomaron otros 15 países europeos como Bélgica, Italia, Francia o Dinamarca.
En todo caso, Moncloa recuerda que para poder entrar a España es obligatorio que todo pasajero procedentes de países o zonas en riesgo se realice una Prueba Diagnóstica de Infección Activa, PDIA, para SARS-Cov-2 en las setenta y dos horas previas a su llegada con resultado negativo.
España acuerda con Portugal la suspensión desde mañana de los vuelos procedentes del Reino Unido
En este sentido, la vicepresidenta primera Carmen Calvo ha hecho este lunes un llamamiento a la tranquilidad asegurando que España «lleva protegida mucho tiempo» por la exigencia de tener una prueba PCR negativa para entrar en nuestro territorio.
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