Es cierto que las tecnologías han cambiado el quehacer diario en un hotel, totalmente de acuerdo, a consecuencia de ello, le facilitamos a nuestros clientes mayores servicios y más eficaces, tanto a la hora de gestionar sus reservas como en el interior del hotel.
Por supuesto, no solamente se beneficia de las tecnologías el cliente, también todo el equipo humano que en él trabaja. Hasta aquí creo que estamos todos de acuerdo, pero elegir un hotel por su domótica y no por el valor de sus empleados creo que es un grave error.
Sin lugar a dudas, las tecnologías han aportado a la hostelería un valor fundamental en los servicios para acercarse al los clientes. De todas formas, acabarán formando parte de nuestros hábitos de consumo, mientras que los valores de las personas no pasarán nunca de moda, por más que algunas empresas los interpongan y consideren más relevante invertir en tecnologías que en recursos humanos.
El desarrollo en nuestro sector de las tecnologías es un fenómeno que se ha disparado, siendo el progreso el que marca las tendencias y debemos estar alerta a todas las ventajas que nos ofrece como clientes y como empresas.
Al mismo tiempo, no debemos olvidar una cosa: es evidente que en el ritmo de vida que llevamos, todos estamos bajo la influencia de las nuevas tecnologías, pero hay un momento que necesitamos una persona para que nos solucione un problema en el hotel, y con una sonrisa siempre lo encontraras a tu disposición en recepción o otro departamento, ¡aunque solo sea para facilitarte un cargador!
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